Los NORM son átomos inestables de origen natural que emiten partículas alfa y beta, las cuales suelen ir acompañadas de radiación gamma. Este proceso llamado “proceso de descomposición” continúa hasta que se alcanza el punto de estabilidad. Dicho tiempo se define como “tiempo de vida media”. El Ra-226/228 tiene una vida media de 1600 / 5,8 años. Transcurrido dicho tiempo, la cantidad de Ra226/228 será un 50% inferior. El material de desecho contaminado con niveles elevados de NORM debe eliminarse de manera controlada para garantizar que no presente un riesgo inaceptable para el medio ambiente y el público en general. Los NORM pueden causar problemas de salud en situaciones de gran exposición.
Durante las etapas de procesamiento del crudo petrolífero en las unidades de Oil&Gas, suelen producirse diferentes tipos de residuos: 1) Tuberías con incrustaciones, 2) Lodos, 3) Equipos metálicos con incrustaciones o lodos, 4) Consumibles incinerables y 5) Consumibles no incinerables
El objetivo de la unidad de Descaling es la eliminación de las incrustaciones adheridas a las tuberías y equipos metálicos utilizados durante las operaciones de Oil & Gas. Para la descontaminación de tubuerías, la incrustación se elimina mediante agua a alta presión (hasta 1400 bar) que elimina la incrustación adherida. El sistema está completamente automatizado y solo requiere la supervisión del operador.
En caso de equipos metálicos contaminados, se instala una cabina de limpieza manual para realizar la operación de descontaminación de forma manual mediante una “pistola” de agua a alta presión. Dentro de la cabina se instala un polipasto para facilitar el manejo de los equipos metálicos de peso elevado
El agua que sale de la unidad de Descaling se trata en la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (WWT). La planta incluye procesos físicos y químicos que garantizan la calidad del agua adecuada para la operación de Descaling
Una de las operaciones más comunes para el tratamiento de lodos es la centrifugación.
Gracias a las diferencias de densidades de los componentes del lodo (agua, aceite y sólidos), la centrífuga es capaz de dividir el lodo en dos o tres fases según el dispositivo seleccionado.
La fase sólida, que contiene la mayor parte de la radiación, se traslada a los silos de almacenamiento para su incineración o solidificación con hormigón. La fase líquida se puede tratar en un separador de aceite para separar la fase oleosa de la fase acuosa en caso de que se seleccione una centrífuga de dos fases.
La incineración es necesaria cuando se requiere la reducción del volumen de desechos y la eliminación de compuestos orgánicos. Las unidades de incineración típicas incluyen una o dos cámaras de combustión, sistemas de tratamiento de gases de combustión y recuperación de cenizas. Los residuos (consumibles combustibles, incrustaciones deshidratadas, lodos, etc.) se introducen en la cámara de combustión mediante transportadores de tornillo, conexión de tuberías o sistemas de doble compuerta.
Los hornos rotativos se instalan como cámaras de combustión primaria debido a su alto rendimiento en el manejo de residuos sólidos.
El gas de combustión que sale de la cámara de combustión es tratado con el fin de reducir la temperatura y eliminar las cenizas remanentes y las partículas contaminantes.
El tratamiento de los gases de combustión suele incluir refrigeradores de gases de combustión, filtros de mangas, reactores, intercambiadores de calor y extractores.
Las cenizas producidas en la cámara de combustión se recogen, enfrían y solidifican con hormigón.
La etapa final del proceso de tratamiento de residuos es la unidad de estabilización y solidificación.
Los consumibles no incinerables y las cenizas se mezclan con hormigón y se transfieren a bidones de 55 gal. Durante la mezcla de cenizas y hormigón, se agregan algunos aditivos para estabilizar químicamente el producto. También se incluye un sistema de enfriamiento en la cámara de mezcla ya que la reacción de estabilización es exotérmica.
Esta operación está totalmente automatizada para evitar la exposición del operador a la radiación de alta actividad producida por las cenizas residuales.
Los bidones se almacenan durante 7 días garantizando un tiempo de curado adecuado.
Más tarde se caracterizan con el fin de obtener la actividad de cada uno de ellos. La caracterización es fundamental para la siguiente etapa de tratamiento, el almacenamiento en contenedores HHISO. Para evitar “puntos calientes” en el repositorio, el HHISO debe llenarse considerando la actividad de cada bidón.
La operación de introducir los bidones en el HHISO se realiza de forma remota mediante un manipulador de bidones vertical.
Una vez que el HHISO está lleno de bidones (normalmente se almacenan 12 bidones en cada contenedor de HHISO), se llena de hormigón y se cubre con una tapa de acero.
Después del tiempo de curado, los envases de HHISO se almacenan en el repositorio.